Uno de los pedidos más frecuentes que se les hace a los profesionales en las
primeras entrevistas de terapia de pareja, es el de brindar herramientas para
restablecer la confianza.
Si queremos ser justos, la realidad es que no existen
“tips” universales que logren imponer en alguien el sentimiento de confianza en
el otro. Cada persona es un mundo y cada pareja es una conjunción de dos
mundos totalmente diferentes que intentan funcionar juntos.
Sin embargo, el espacio de terapia de pareja permite poner una pausa en los conflictos que se
presentan en un espiral del cual es muy difícil salir. En esta pausa, se
puede restablecer es la función de la palabra. Dar un lugar a la palabra propia y
a la palabra del otro propicia una nueva forma de encontrarse a pesar de las
diferencias y, desde este lugar, empezar a armar nuevos pactos en los que el
vínculo vuelva a armarse. Entonces, no se trata de tips sino de trabajo y
compromiso. Un trabajo arduo, desde ya, ¡pero no imposible!