Las parejas que duran tienen una historia, un presente común y una dirección hacia el futuro.
Cuando consultan las parejas: cuando no pueden convivir; cuando no se ponen de acuerdo con los proyectos; cuando no se pueden escuchar y tienen discusiones circulares; si traspasaron las reglas propias de la pareja y no pueden reacomodarse; cuando no saben como orientar sus proyectos; cuando los proyectos individuales no pueden ser incluidos en el proyecto de pareja; porque tienen celos, fundados o infundados; cuando se trepan a las escaladas de violencia; si no se pueden separar, aunque consideren que sería lo mejor; cuando tienen que tomar decisiones sobre los hijos. Cuando arman una nueva familia, que se convierte en familia ensamblada. Y muchísimas versiones más!
Un tratamiento de pareja está orientado a delimitar los problemas y reorientar el curso de lo que los protagonistas de esa historia que traen.