Ya casi se cumple un año desde que estamos en esta situación. Hay una pandemia mundial. Primero lo veíamos en las noticias, pero se fue acercando. Empezaron las medidas de precaución que todos conocemos, los cierres de las escuelas. Cambiamos nuestra forma de trabajar y de encontrarnos con nuestros amigos. Estudiamos con colegas por videollamadas, festejamos cumpleaños por Zoom, bailamos desde las casas y vimos muchísimas series, películas y programas para tratar de combatir la sensación de encierro, aislamiento social, falta de contacto cotidiano. Nuestras costumbres tan porteñas! Nos saludamos afectuosamente con un beso, nos abrazamos con nuestros amigos, bailamos en rondas en las fiestas. Tomamos mate!
Mi trabajo cambio radicalmente, antes veía pacientes en mi consultorio y atendía por videollamada a muy poquitos que eran muy conocidos. A partir de cambios en la vida cotidiana, se mudaron lejos, nacieron sus hijos o cuestiones así, quisieron seguir trabajando conmigo pero se les hacía imposible llegar a mi consultorio en Villa Crespo en Buenos Aires. Mi barrio, un lugar bastante céntrico, cercano al subte que pasa por debajo de Avenida Corrientes y llega al Obelisco.
Descubrimos muchas cosas y nos divertimos bastante a partir de este cambio inesperado de vida. El otro día me desperté estaba soñando que me reía a carcajadas con mi amiga Andrea. Creo que la pandemia se está metiendo en mis sueños. Por ahora ningún amigo o pariente cercano se enfermó gravemente, por suerte! Pero mi vida, como la de todos cambio en sus formas más cotidianas. Buenos Aires es una ciudad con una vida social increíble, teatros, bares, actividades públicas. Todo cerrado!
Cambiaron las consultas, las casas se complicaron. La presencia permanente de las personas en sus casas trajo conflictos de convivencia. Faltan los momentos para extrañar a los otros integrantes de la familia. La distribución o mala distribución de las tareas en las casas salió a relucir! Hubo record de consultas de pareja! Algo totalmente imprevisto para mi. Intento contarles un poco lo que fui aprendiendo en este tiempo tan especial, que nos marcará la vida.
Ire Fuks